Diana Adriano
“Estoy de acuerdo en que debemos parar ya esta violencia en contra de las mujeres, pero no irnos al extremo de que todo está mal en los varones”. Esta es una de las sentencias que hace la hermana Georgina Onofre, misionera de María Dolorosa experta en Mariología, quien habla en esta entrevista sobre cómo María puede iluminar el momento actual que se vive en México y el mundo. en torno a este tema, en el que, dice, debemos tomar como modelo a la mujer más femenina de todas: la Virgen María.
¿Cómo ilumina la Virgen María la realidad que viven hoy las mujeres en México respecto a la violencia?
En primer lugar la Virgen María siempre está de parte de lo que es de Dios, el querer de Dios ante hombres y mujeres es muy claro, pues es el amor ante todo, el valor más grande que es la vida y es muy claro que la Virgen María va a estar en contra de todo lo que sea violencia de cualquier persona, en este caso de las mujeres no solamente porque ella era mujer.
A lo largo de los siglos, las mujeres siempre hemos sido el punto más vulnerable para los ataques y precisamente porque somos personas que no tenemos tanta fuerza y por eso somos más fuertemente violentadas y se ha agudizado la violencia, pero eso no es algo nuevo.
Es una realidad que se ha presentado a lo largo de toda la historia y en la mayoría de las culturas se ha mostrado a las mujeres en un estatus de ser secundarias, de ser desvaloradas, de no tener presencia, de ser consideradas más objetos que personas, de no tener una representatividad o un protagonismo en la historia de cada una.
¿Qué opina del paro convocado para el 9 de marzo en denuncia a la violencia sobre las mujeres ¿Qué hubiera hecho María en este caso?
Ahora con los asesinatos de Ingrid Escamilla y de la niña Fátima, sean desencadenados muchas reacciones dentro de nuestro pueblo y qué bueno, pero qué lastima que algunos grupos feministas los utilicen para sus propios intereses.
Por ejemplo, la marcha y el paro que se está generando ahora, ciertamente tiene una parte de verdad porque el pueblo ya está harto de toda la violencia, pero no solamente en contra de las mujeres sino también de los hombres, porque no son solamente las mujeres son las que mueren. Es muy triste que se utilicen estos casos para intereses propios y sobre todo en contra de la vida misma, como el aborto.
Pero, como una voz que quiere levantarse en contra de la violencia, yo creo que esta cosa sería algo bastante buena, ver eso y decirle a la gente que se sume a todo esto, pues va en contra de la violencia vs la mujer, pero no haciendo partidismos o feminismos extremistas que lo único que hacen es ver a los varones como fueran enemigos de las mujeres, cosa que no es verdad, entonces sí tener en ese sentido un poco de objetividad, un equilibro al momento de pronunciarlos. Tenemos que ver que este paro no sea dirigido por un feminismo negativo, y si es así, las que vayan a participar sean muy claras al no estar de acuerdo con ese tipo de cosas. Estoy de acuerdo en que debemos parar ya esta violencia en contra de las mujeres, pero no irnos al extremo de que todo está mal en los varones.
¿Qué elementos podemos tomar de la Virgen María para dar una respuesta a la realidad de la violencia doméstica que se vive en México -Por ejemplo mujeres sometidas por la pareja, al grado de “buscarle una novia”, como en el caso de la niña Fátima-..
Las mujeres son las que sufren más violencia doméstica, eso también tenemos que decirlo, ya no es posible vivir en una sociedad donde las mujeres y los varones tenemos miedo de salir a la calle, una inseguridad terrible y una falta de atención por parte de las autoridades correspondientes, por ejemplo, en el caso de la niña Fátima mencionaron sus familiares que no se les apoyó inmediatamente cuando reportaron que la niña estaba desaparecida.
Qué para decir que es desaparición tenían que haber pasado 72 horas, ¡por amor de Dios con una niña, no es posible! una hora es más que suficiente para que se mencione como desaparecida.
Esto es una manera de afrontar la realidad, en la que obviamente la Virgen María está de parte de la vida, está de parte del amor y sobre todo de la justicia y que ante Dios tenemos la misma dignidad. La Virgen nos enseña que tenemos que ser valoradas, estimadas y en caso de ser necesario, también tenemos que ser impugnadas cuando lo merezcamos, la violencia jamás es una respuesta.
Creo que también es un llamado a las autoridades del Estado para que de verdad haga algo para evitar la violencia doméstica, la violencia dentro y fuera de las casas. Esto es una lucha por la paz, la Virgen María está a favor de la dignidad humana, ella la quiere para todos sus hijos varones y mujeres.
¿Cómo intercede María en la protección a las mujeres, en su realidad diferente de los hombres?
María es mujer, en primer lugar sus intercesiones son para todos sus hijos, obviamente intercede por los más pobres, los más necesitados, los más oprimidos, los más marginados y entre ellos, las mujeres, porque ahora sí que nos tocó ser las esclavas entre los esclavos.
Ciertamente esto es un hecho que no tenemos que dejar, el lado mariano. María responde no solamente con su intercesión, sino también con su ejemplo de vida pues María es una mujer que supo tomar su protagonismo en su historia. Supo tomar decisiones que fueron realmente radicales e importantes para toda la humanidad, no solamente para ella misma. Ella como mujer tuvo que romper con muchas cosas para darle una respuesta clara a Dios y eso es lo que nos enseña: a romper con los esquemas, con estereotipos ya predeterminados.
Dios al momento de llamar a María y hacerle una propuesta la respeta como persona, respeta su individualidad, respeta su vulnerabilidad, su decisión. Asimismo, ella lo comprende y responde de sí misma también.
Creo que ese es el modelo que nosotros debemos seguir: también nosotras como mujeres tomar las riendas de nuestra propia vida, decidir ante Dios y ante los demás lo que queremos hacer, en este caso María, obviamente va a ser nuestra compañera, nuestra modelo y también nuestra intercesora.
¿Cómo nos enseña la Virgen María el tema del feminismo?
Es necesario decir que hay diferentes tipos de feminismo y que el feminismo propio de la Iglesia es aquel quiere reivindicar a la mujer en el amor de Dios y el verdadero puesto de ella, con dignidad y amor de la mano del varón.
Pero una cosa es hablar de igualdad y otra de sus funciones, no somos iguales en cuanto a nuestras funciones específicas a los sexos, pero si es una igualdad en cuanto todos tenemos la misma oportunidad de expresarnos y realizarnos tanto en lo personal, como profesional, incluso espiritualmente. Este es el feminismo que debe rescatar la Iglesia, también tenemos que decir que hay feminismos muy negativos en los cuales exaltan el derecho de la mujer sobre su propio cuerpo, hablando del aborto, se ve la ideología de género y a los varones como enemigos de las mujeres. Este tipo de feminismos son negativos y no los podemos aceptar.
Y también es necesario decirlo: María y Dios están de parte de la justicia, la vida, el amor, la paz, del respeto a la persona humana, pero también tenemos que ser claros pues por desgracia nuestras sociedades están creando todo tipo de personas, donde la violencia no solamente se le da de lado del varón.
Por ejemplo, en el caso de la niña Fátima tenemos que recordar que fue una mujer de la que se la llevó, no podemos olvidar eso tampoco. Entonces no podemos tampoco angelizar a las mujeres o a los varones por este tipo de cosas y sobretodo viendo nuestra sociedad que a diario mueren varones por víctimas de la violencia, entonces ellos también están siendo atacados y violentados.
Desde su visión como experta en Mariología, ¿Cuáles son los retos que tiene la Iglesia y la sociedad en este tema?
La Iglesia tiene muchos retos, nosotras como mujeres cristianas tenemos que preguntarnos ¿qué es lo que queremos para las próximas mujeres?, no olvidemos que la que ha enseñado tantas cosas de machismo ha sido la mujer, incluso no el machismo como violencia, sino como la forma normal de vida. Han sido las mujeres que están enfrente de la familia, las que mencionan a las hijas que le planche la camisa de hermano, que le caliente las tortillas, hazle la comida tu papá, somos las mujeres las que en parte hemos tocado este tipo de relaciones. Principalmente, nosotros como cristianos debemos tomar las riendas de nuestra vida y de nuestras decisiones y ponerlas en un primer momento ante Dios, debemos ser responsables de nuestras actitudes, acciones, de nuestra respuesta y recordar que el cambio siempre empieza por uno mismo.