Ana María Ibarra
Después de varios años con el asfalto destruido haciendo difícil el acceso al templo parroquial de Santa Margarita de Cortona, el pasado domingo 29 de enero se dio por oficialmente reinaugurada la calle Mamey, reparada con pavimento hidráulico desde la calle Cártamo hasta la Centeno (Colonia Granjero).
Autoridades municipales, quienes atendieron el llamado de la comunidad para la repavimentación, se hicieron presentes en la misa dominical del medio día, en la que el padre René Murillo, párroco, agradeció a Dios por ese logro.
El sacerdote dio la bienvenida al presidente municipal Cruz Pérez Cuellar, quien iba acompañado de su esposa y otros funcionarios de la Administración municipal.
“Jesús nos da un mensaje con las bienaventuranzas. Dichosos lo que lloran, los que sufren… Jesús es ejemplo vivo de las bienaventuranzas. Los santos no son perfectos. La clave de la santidad es captar el espíritu de las bienaventuranzas. Jesús es el loco enamorado del Reino de los cielos”, expresó el párroco durante su homilía.
Beneficio para los fieles
Al concluir la celebración, las autoridades dieron algunos datos técnicos sobre la repavimentación de la calle, cuya extensión es de casi 13 mil metros cuadrados. Se introdujo también una tubería nueva y se realizaron conexiones hidráulicas -agua y drenaje-, además de que se repararon las banquetas y se atendió el alumbrado público.
“Ya tenemos calle nueva, muchísimas gracias a todos los colaboradores del municipio.
Ahora requerimos arreglo del parque”, expresó el sacerdote comprometiendo a la administración a atender también esa necesidad.
“Poco a poco nuestra colonia se va a levantar muchísimo. Esto le da vida, era muy necesario. Que Dios le conceda espíritu de servicio a usted y a todos sus colaboradores”, dijo el padre René al alcalde, quien afirmó que la pavimentación tendrá una vida útil de más de 30 años.
“La calle estaba intransitable. Ahora es una calle de mucha utilidad, bien hecha. Esperemos que otros detalles de nuestra colonia se pueden atender. Esta reparación ayuda para que los fieles tengan libre acceso a la parroquia”, dijo el padre René.