Diana Adriano
Hace siete años, Ciudad Juárez recibió la visita del Papa Francisco, un acontecimiento que dejó una huella imborrable en la comunidad católica y en la sociedad en general.
Para conmemorar este aniversario, el pasado 17 de febrero se realizó un tour por el Seminario Conciliar de Ciudad Juárez, el lugar donde el Papa descansó durante su visita.
Bello recuerdo
El tour recorrió las instalaciones del Seminario, sus diferentes capillas y concluyó en el ‘Museo del Papa’, lugar en el que los visitantes pudieron disfrutar una exposición de fotografías y objetos relacionados con la visita del Papa, como la sede en la que se sentó durante la misa que celebró en El Punto, artículos de la habitación que ocupó durante su estancia, etcétera.
El tour estuvo guiado por los seminaristas Brian de Haro y Roberto Almodóvar, quienes durante el recorrido resolvieron dudas y compartieron datos muy interesantes del recinto.
Durante el recorrido, los seminaristas destacaron la importancia de la visita del Papa para la comunidad de Juárez y para el país en su conjunto.
«La visita del Papa Francisco fue un mensaje de esperanza y de paz para toda la sociedad mexicana, especialmente para aquellos que han sufrido la violencia y la marginación», señaló Brian.
Como se sabe, durante su visita a Juárez, el Papa Francisco se reunió con un grupo de reclusos en el Centro de Readaptación Social número 3, celebró una misa en El Punto y visitó el Seminario Conciliar, en el que se reunió con un grupo de seminaristas y bendijo la capilla de la institución.
Su mensaje de amor, justicia y solidaridad resonó más allá de la frontera, y ha sido recordado con cariño y admiración por los fieles y los ciudadanos en general, compartió Roberto a los asistentes.
Una historia interesante
En los artículos que se encuentran en el ‘Museo del Papa’ los seminaristas compartieron la historia de una pequeña mesa y dos sillas en particular.
“En ese momento, se pidieron muebles para poder acondicionar un espacio para el Santo Padre. Entonces, una señora trajo una silla y dos mesas, pero le dice al padre Alberto Castillo que solo eran prestadas, y el padre Alberto le comentó que todo lo que fuera a usar el Santo Padre se iba a quedar en un museo”, dijo Roberto.
Explicó a los visitantes que esta mujer le propuso al padre Alberto como trato que comprobara que el Papa Francisco utilizó la mesa y la sillas y entonces regalaría los muebles.
Y resulta que cuando pidieron al Santo Padre que escribiera una frase dedicada al Seminario, el papa utilizó una de las mencionadas sillas y la mesa para firmar una hoja.
“Ese momento quedó captado en foto, por lo que el padre Castillo le pudo comprobar a la señora que la silla y la mesa sí fueron utilizada por el Santo Padre, de tal forma que son piezas que se exponen en este museo”, dijo el joven seminarista.
El tour por el Seminario Conciliar de Ciudad Juárez fue una oportunidad para recordar y la visita del Papa Francisco y sus mensajes, y para reflexionar sobre los valores que promueve la Iglesia católica y que son fundamentales para construir una sociedad más justa y humana.