Diana Laura Mtz. Adriano
Con motivo del mes del Santo Rosario, la comunidad del Instituto México que se dedica a la educación de los niños y jóvenes de la localidad, se congregaron en el rezo del Rosario Viviente reconociendo el deber como cristianos de estar al pendiente de nuestros hermanos migrantes.
“Este año estamos rezando el Rosario por los migrantes, por la situación que se está viviendo en nuestra ciudad, nuestro país y en todo el mundo”, mencionó Victoria Komiyama, directora general del Instituto México.
El evento se llevó a cabo el pasado jueves 10 de octubre, en las instalaciones del gimnasio.
Rezo en comunidad
Al rezo asistió toda la comunidad educativa con una vestimenta blanca reflejando la paz y la tranquilidad por la cual se pidió para los migrantes, quienes viven momentos difíciles al dejar sus hogares atrás.
“En cada uno de los misterios planteamos las situaciones que viven los migrantes para llegar a su destino, como la falta de alimentación, que se alejen las familias, la carencia en la búsqueda de una mejor calidad de vida”, comentó Nadxieli Ruvalcaba, maestra encargada de la pastoral del colegio.
De igual manera, al ser una institución educativa, la comunidad marista se encargó de que sus alumnos se involucraran y fueran parte de este rezo del Rosario.
“Nuestros alumnos de primaria, secundaria y prepa se hicieron presentes dirigiendo la oración en cada rezo, así como algunos fueron parte del coro y otros se hicieron una presentación teatral después de cada misterio”, agregó.
Ayuda al prójimo
En el evento, los maristas resaltaron la importancia del mostrar la solidaridad con los migrantes a través de la oración, pero sin olvidar la ayuda humanitaria.
“Estamos muy orgullosos de nuestros alumnos, pues con entrega se hacen presentes con su servicio social en la Casa del Migrante, al ver la situación que se está viviendo en nuestra localidad”, explicó la directora al resaltar que como católicos siempre tenemos que “ver el rostro de Jesús en cada uno de nuestros hermanos necesitados”.
Al finalizar, pidieron a María que siga guiando a la comunidad marista de Ciudad Juárez, la proteja y les permita seguir manifestando su devoción hacia ella, la cual les permite llegar a Jesús.