Por primera vez luego de dos años de pandemia, las familias pertenecientes al movimiento Congreso de Matrimonios se reencontraron en una actividad de convivencia…
Ana María Ibarra
Con un clima que favoreció la convivencia y llenos de entusiasmo por estar nuevamente juntos, el movimiento diocesano Congreso de Matrimonios tuvo su primera Convivencia Familiar después de dos años de estar sin actividades a causa de la pandemia.
Realizaron su tradicional día de campo el pasado domingo 22 de mayo en el parque DIF, a donde acudieron integrantes de asambleas matrimoniales de distintas parroquias.
Ambiente fraterno
Las familias iniciaron su actividad con una oración para agradecer a Dios tan maravilloso día que les regalo para compartir en comunidad. Enseguida hicieron un poco de actividad física como calentamiento antes de entrar a los juegos y competencias preparadas para ese día.
Mientras algunos grupos de familias se dispusieron a descansar y charlar entre ellos, otras familias se adentraron en el Rally que se organizó.
Papás, mamás e hijos, participaron con gran entusiasmo en cada uno de los juegos: carrera de costales, con globos, lanzamiento de aros, entre otros.
Además, algunos tuvieron la iniciativa de retar a otros matrimonios en partidos de basquetbol y volibol.
Dado que el parque fue cerrado al público en general y solo los grupos de Congreso de Matrimonios y asambleas estuvieron presentes, el lugar se volvió seguro para los niños, que llenos de energía corrían por el parque o se divertían en los juegos como columpios, y resbaladillas.
Si bien cada comunidad de asamblea llevó su propia comida para saciar el hambre de la tarde, compartieron con los demás, notándose así el ambiente de fraternidad que existe en este movimiento diocesano.
Felices con el reencuentro
Después de los alimentos continuaron los juegos para definir a los ganadores quienes fueron premiados.
“Nos da mucha alegría que ya podemos realizar estas actividades. Con la pandemia nos encerramos un poco, pero gracias a Dios que ya salimos. Las comunidades estuvieron muy alegres y contentas de convivir en este rally”, compartió Ana María Jara, quien junto con su esposo Eduardo coordinan actualmente el movimiento de Congreso de Matrimonios Católicos.
“Competimos con juegos sencillos, pero cansados. Estamos felices y contentos. Le damos gracia s a Dios por las personas que nos acompañan. El Señor nos regaló un día muy bonito, no hizo tanto calor. ¡Qué más le podemos pedir al Señor! Fue un día formidable y lleno de bendición”, agregó Ana.
Entre los grupos de asamblea de matrimonios que se hicieron presentes se encontraban de las parroquias Mártires Mexicanos, Santo Tomas Apóstol, Corpus Christi, el equipo de congresos, entre otros.
En frase…
“Les invitamos a que acudan a las asambleas de matrimonios, que se den la oportunidad de ir, ahí encontrarán al Señor que los está esperando con los brazos abiertos”.
Ana y Eduardo Jara