En evento virtual de Familia Unida sacerdotes legionarios de Cristo presentaron diversos temas y las parejas también renovaron sus votos matrimoniales
Ana María Ibarra
Reconectando 3.0 fue el evento virtual dirigido a matrimonios que el movimiento Familias Unidas Internacional realizó el pasado 26 de febrero.
En el evento, las parejas pudieron escuchar distintos temas, además de renovar sus votos matrimoniales.
Casados o cazados
¿Cazados o felices?, fue uno de los temas presentados, y fue impartido por el padre Guillermo Serra, de la comunidad Legionarios de Cristo.
En su charla, el sacerdote presentó a las parejas 10 reglas para la felicidad con el objetivo, “de ayudarles a descubrir si se encuentran ‘casados o cazados’”.
“La primera regla es: pensar bien. Deben recordar que hombres y mujeres piensan diferente, pero son complementarios. La invitación es a pensar siempre bien del otro. ¿quién quiere estar con alguien que piensa mal de mí?”, cuestionó.
Estar cara a cara, segunda regla, fue un ejercicio que el sacerdote sugirió para cualquier momento del día, especialmente en los momentos de tensión.
“Colóquense uno frente al otro, sin decir nada, tómense de la mano y mírense a los ojos. Ahí se pierden las tensiones”.
“Siguiente regla: ser refugio. Ustedes pregúntense si el uno para el otro se sienten un refugio. ¿soy un refugio para el otro?”.
‘Buscar el arca perdida’, dijo como siguiente regla, que significa amar el amor incondicional, amar al otro para siempre y estar siempre en su búsqueda.
“Sentir que todo es posible, quinta regla, y para ellos se requiere comunicación, porque a veces el matrimonio puede vivir pensando que todo es imposible y ya no hay magia”.
‘Vivir el tiempo para que sea vida’ es una regla cuyo significado es interesarse por aquello que une a la pareja, no que los divide.
“Séptima regla: comunicación asertiva. La comunicación es algo que hay que trabajar. Los invito a mejorar su comunicación”, dijo el sacerdote.
Luego presentó la regla ocho: ‘tener la valentía de subirse al avión de la vulnerabilidad’, que implica descubrir juntos lo que les duele y pesa. En este punto, la invitación fue trabajar sus emociones y expresar sus gustos y disgustos.
Y el sacerdote ponente concluyó con las reglas nueve y diez: ‘Vivir los duelos sin pistolas’. (En el matrimonio hay pérdidas, pero también ganancias) y ‘ser cómplices’, que implica saberse reír de tonterías.
Conectados y re-conectados
Después de una mañana de trabajo y temas, los matrimonios conectados en la red social, se dispusieron para ir a la fuente del amor, que es Cristo, y renovar su amor en la misa presidida por el padre Juan Manuel Puente.
En su homilía, el sacerdote invitó a los matrimonios a reflexionar sobre ese momento en que como pareja se van alejando, dejando de decir “te quiero”.
“La propuesta es dar unos pasos atrás y recuperar lo que han perdido: esas primeras miradas, el primer beso, de manera que puedan hacerlo de nuevo, enamorarse, hasta descubrir dónde se perdieron. Acérquense a Dios, nuestro Señor, para que los sane, pedir su ayuda y sus regalos”, motivó.
Después de la homilía, el sacerdote pidió a quienes estuvieran siguiendo la transmisión ponerse de pie para renovar sus promesas matrimoniales.
Para la renovación, el padre Juan Manuel les pidió quitarse los anillos y, durante la renovación, guiados por él, colocárselos de nuevo.
Así, repitiendo lo que el sacerdote les fue indicando, los matrimonios hicieron sus promesas y se colocaron nuevamente sus anillos.
Confiado en que el momento haya sido de alegría y sanación para los matrimonios, el padre Juan Manuel continuó con la celebración y al final les dio su bendición.