Parroquia se convirtió en un espacio dedicado a la adoración y el gozo espiritual.
“De eso se trata, una fiesta con Jesús, pues tenemos un Dios alegre y por eso queremos nosotros siempre estar alegres con Jesús”
Diana Adriano
La parroquia Asunción de María se llenó de música, alegría y fe durante una emotiva “Noche de Alabanza” el pasado 16 de noviembre. Decenas de niños, jóvenes y familias se congregaron al caer la tarde para participar en un espacio dedicado a la adoración y el gozo espiritual.
Ernesto Acosta, catequista de la parroquia y coordinador del evento, compartió el propósito de esta celebración:
“Estamos celebrando una fiesta con Jesús que básicamente es puras alabanzas de adoración, gozo, carismáticas y de pura alegría. De eso se trata, una fiesta con Jesús, pues tenemos un Dios alegre y por eso queremos nosotros siempre estar alegres con Jesús”.
Las actividades comenzaron desde las 3 de la tarde con una venta de tacos para fomentar la convivencia entre los asistentes. Sin embargo, el momento más esperado llegó a las 7 de la noche, cuando los coros comenzaron a llenar el recinto con sus voces.
Seis coros participaron en esa noche especial: el coro de niños de la parroquia Asunción de María, el coro de Matrimonios, el coro de la capilla El Buen Pastor, el coro de la misa de 12, el coro de Confirmaciones y el apoyo del coro de la parroquia del Espíritu Santo.
Cada uno aportó un toque único, convirtiendo la jornada en un espectáculo lleno de espiritualidad y energía.
Primera noche de alabanza
Acosta señaló que fue la primera ocasión que realizaron un evento como éste y expresó su entusiasmo por la respuesta de los asistentes.
“Hemos tenido un buen flujo de gente y todos están muy animados, que es lo más importante. Cerraremos con toda la energía. Es importante para los jóvenes y todos que se den cuenta que también nosotros podemos ser transmisores de espiritualidad a través de la música y el canto”, expresó.
Además del enfoque espiritual, este evento tuvo un propósito adicional: recaudar fondos para la remodelación del templo, por lo que Ernesto explicó que también hubo venta de pizza, elotes y tamales.
“Estamos en remodelación de la parroquia, entonces todo lo que se está juntando es para eso, para seguir la renovación del templo”, explicó.
El padre Ricardo González, párroco de la comunidad, se mostró visiblemente emocionado y disfrutando cada momento del evento. Durante toda la noche se le vio acompañando a los asistentes con una sonrisa y aplaudiendo al ritmo de las alabanzas.