Ana María Ibarra
Con carros alegóricos, la comunidad parroquial de Dios Padre celebró el día de Todos los Santos, mostrando por las calles del territorio parroquial que la santidad no está lejos para los católicos, pues es un llamado desde el Bautismo. El evento se realizó el pasado 3 de noviembre, iniciando con una misa presidida por el párroco Jorge Iglesias.
La Misa
Resaltando la santidad única de Dios, el padre Jorge señaló cómo la comparte con su pueblo.
“Hoy recordamos a tantos hombres y mujeres santos de Dios. La santidad no está lejos de nosotros, hemos sido llamados a la santidad desde el Bautismo. Pidamos a Dios que nos conceda la gracia de conservar la santidad”, expresó el sacerdote al inicio de la celebración.
En su homilía, reflexionó sobre los tres estados de la Iglesia: Peregrina, purgante y triunfante.
“La Iglesia Peregrina somos nosotros; la Iglesia Purgante se encuentra en el purgatorio, y la Iglesia Triunfante son los santos. Sabemos que sólo Dios es santo, pero nos hace partícipes de esa santidad por el Bautismo, nos toca mantenerla y manifestarla”, dijo.
A la luz del evangelio, el sacerdote invitó a la comunidad a dejar entrar a Jesús en la casa del corazón, en su vida y su familia.
“El Señor nos quiere, nos ama y nos perdona. No tengas miedo de abrir las puertas del corazón a Jesús”, expresó.
La procesión
Después de la Eucaristía la comunidad avanzó en los carros alegóricos previamente decorados, llevando la imagen, o la representación en persona de un santo o santa de la Iglesia.
Con detalles decorativos que resaltaron la vida y misión del santo o santa de su elección, cada grupo o pequeña comunidad avanzó llevando al frente el carro principal, que indicaba la Ruta de la Santidad.
Le siguieron vehículos con santos como San Ignacio de Loyola, San Francisco de Asís, Santa Mónica, Santa Rosa de Lima, San Charbel, Padre Pio de Pietreccina, Santa Rita de Casia, San Juan Pablo II, Santa Teresa de Calcuta, entre otros más.
Aparte, los niños del Catecismo y los jóvenes de Confirmaciones también representaron con vestimentas a algunos de los siervos de Dios.
Durante el trayecto el coro entonó alabanzas para mostrar el gozo de la Iglesia Peregrina que celebraba a la Iglesia Triunfante, mientras algunos de los grupos entregaron dulces en el camino, en un gesto para contrarrestar la celebración del Halloween.
La comunidad recorrió las calles del sector por espacio de hora y media y al concluir la peregrinación, en unidad fraterna, compartió los alimentos.






