Proveniente de Cancún, la cantante católica Lupita Aguilar realizó diversas actividades piadosas en la Diócesis de Ciudad Juárez
Ana María Ibarra
Consuelo y esperanza fue lo que transmitió, a través de su canto y oración, la cantante católica Lupita Aguilar quien estuvo en la diócesis del 8 al 11 de septiembre participando en eventos religiosos públicos y privados.
Uno de los eventos públicos fue la hora santa en la parroquia La Sagrada Familia el jueves 8 de septiembre.
En ese espacio, ante el Santísimo Sacramento, Lupita oró por las necesidades del mundo, de México y en especial de Ciudad Juárez.
La cantante habló del dolor en el mundo y señaló que, en este tiempo, el dolor suele volverse común y difícil de conmover, e invitó a pensar en el dolor que sintió María al ver a su hijo crucificado.
“Si Jesús era bueno con los ajenos, cómo no sería con su mamá. Estamos en esta hora santa llegando a Jesús por María”, expresó.
Refiriéndose al misterio de la Eucaristía, Lupita compartió que, Jesús, conociendo la condición humana que se deja llevar por los sentidos, quiso quedarse en la hostia consagrada e invitó a los presentes a contemplar a Jesús en el Santísimo Sacramento.
“Es el mismo Jesús que le habló a Pablo, el mismo Jesús que sale a nuestro encuentro. Dale gracias por ofrecerte lo mejor de Él: su Vida y su Cuerpo”, expresó Lupita.
La cantante concluyó la hora santa invitando a la comunidad a agradecer a Dios por ese momento.
Testimonio de fortaleza
En entrevista con Periódico Presencia al final del Rosario que realizó en el Vía Matris de las Hermanas Misioneras de María Dolorosa, Lupita Aguilar compatió con Periódico Presencia que para ella fue gran testimonio su visita a esta comunidad fronteriza.
«Encontré una gente que sufre, pero con una gran fe. De estos días me queda un gran testimonio de la fortaleza que tiene esta gente, la fe tan grande, tan arraigada que tienen, pero también esa gran necesidad y que me han recibido porque tienen necesidad de esperanza, de alguien que les hable del amor de María que nos acompaña”, dijo.
Agradecida con Dios por permitirle compartir con la comunidad de la Diócesis de Juárez, dejó un mensaje a la comunidad diocesana: “Conserven su fe. El bien va a triunfar, no se desesperen. Fijemos más la mirada en el amor de Dios, porque ya triunfó y eso es lo que nos mantiene en la esperanza”.
María y los ángeles
Esa tarde Lupita llevó a cabo el rezo de los misterios gloriosos, elevando plegarias a Jesús por María en su advocación como desatadora de nudos.
Con cantos y reflexiones, Lupita logró que los corazones de los asistentes, en su mayoría mujeres, se sintieran consolados y experimentaran el amor de Jesús y de María.
Para finalizar, Lupita recordó a las asistentes que, además de del auxilio de María, el ser humano cuenta con el auxilio y protección de los ángeles custodios y como canto final, de pie y con palmas, todas entonaron “Ángeles de Dios”.
Para saber…
En días previos Lupita también se encontró con la comunidad del Seminario Conciliar de Ciudad Juárez en una Hora Santa, y de la parroquia El Señor de los Milagros, en Riberas del Bravo, donde participó en el rezo del Santo Rosario.