Presencia
Sin que sea una sorpresa para la población fronteriza, autoridades de Estados Unidos prolongaron las restricciones en los Puentes Internacionales a los cruces no esenciales hasta el 21 de septiembre, pero con posibilidad de que vuelvan a extenderse.
Como se sabe, desde marzo del año pasado, es decir, hace ya más de un año y medio, los puentes internacionales han estado cerrados para turistas o personas que vienen de visita. Sólo se permite ingresar por causas de trabajo, salud y otras actividades consideradas esenciales.
De acuerdo al Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos la causa de la extensión es el incremento de casos de la variante Delta del Covid-19, sin embargo, muchos consideran que ya es tiempo de la reapertura por el porcentaje de personas vacunadas en ambos lados de la frontera. Por ello la pregunta de esta semana es:
¿Cuál Cree que ha sido el mayor impacto en la prolongación del cierre de cruces fronterizos en el último año y medio?
A 17 meses de haberse decretado el cierre de la frontera, México – EE UU, más concreto para nosotros, la imposibilidad de cruzar de Juárez a El Paso y en contra, las consecuencias son muchas.
- En lo humano y familiar: Se ha roto la convivencia de familias, la práctica frecuente de encontrarnos padres, hijos, hermanos, etc. la realidad es que somos una comunidad con puentes que antes nos comunicaban y ahora nos han incomunicado. Extrañamos los abrazos de las personas que amamos y nos aman y, aunque lo entendemos por la pandemia, nos hace falta la presencia física de nuestros familiares y amigos.
- En lo económico son muy graves las repercusiones del cierre fronterizo:
Para el comercio e industria la afectación es en razón de los costos de productos y materias primas, en el ámbito que conozco tenemos incremento de hasta el 200% en los fletes, escasez y aumento en costos de los productos de entre el 15 y el 40%.
Los consumidores hemos tenido que cambiar nuestros hábitos de compra, pues históricamente hay artículos que adquiríamos en la vecina ciudad, en razón de precio y calidad y otros los comprábamos en negocios locales, pero nos hemos tenido que adaptar a adquirir todo en nuestra ciudad, en donde hay y ha habido desabasto de productos básicos.
Por las anteriores razones se ha afectado nuestra economía familiar y comercial.
3.- En el aspecto emocional, nos hemos llegado a sentir prisioneros en nuestras casas y en la ciudad, ya que Juárez-El Paso, somos un territorio muy separado de otras ciudades y hemos visto reducida nuestra movilidad al espacio de Juárez. Independientemente de los contactos personales, de las compras y el consumo es muy estresante y frustrante que mes a mes nos digan las autoridades que se prolonga el cierre uno o dos meses más, con la consiguiente cancelación de planes familiares, sociales y comerciales. ¿Será que no sólo es por la pandemia, sino por cuestiones políticas? Lo cierto es que hay familias que han perdido algún ser querido sin cerrar el ciclo, si poder despedirlo, hay empresas que han tenido que cerrar sus negocios, con la consecuente pérdida de ingresos y afectación permanente de su economía y estamos esperando, desesperadamente, el momento en que podamos cruzar libremente de un lado a otro de la frontera.
Muchos de nosotros y de los paseños ya hemos recibido las dos dosis de vacunas y hemos aprendido a protegernos y proteger a los demás, ¿Por qué no se restablece ya el libre tránsito entre nuestras ciudades?
María de la Asunción Gutiérrez/ Empresaria
El principal impacto son las relaciones humanas. Por tradición histórica, Ciudad Juárez y El Paso son ciudades hermanas, tenemos muchos vínculos familiares y de negocios en ambas ciudades, de Juárez a El Paso y de El Paso a Juárez. Muchas personas no han podido ver a sus familiares y esto hace daño en las relaciones humanas, creo que este factor es el más importante y por lo que respecta a la economía, hay miles familias que dependen de lo que consiguen en El Paso para vender en sus tienditas, para comprar ropa de medio uso que es barata para ciertos niveles económicos de familias en Juárez, que se han tenido que privar de todo esto. Comercialmente, hablando ya de negocios grandes, también hay afectación, porque vemos mercancías restringidas, lo que aumenta precios y eso afecta. Nos preguntamos por qué mantienen la frontera cerrada, porque en El Paso la mayoría está vacunado y en Juárez también, y creo que hemos aprendido a cuidarnos un poco mejor. Los que sí pueden pasar de El Paso, vienen a una zona donde tenemos menos infraestructura hospitalaria, menos medicamento y sin embargo han pasado, y gracias a Dios no hemos tenido ningún impacto fuerte, entonces creo que es tiempo de que se pudiera abrir, con ciertas restricciones, por ejemplo pedir que toda la gente que cruce al El paso esté vacunada, y la segunda es el uso obligatorio de cubrebocas, sana distancia y el que no lo cumpla, que haya sanciones, pero no que se cierre tanto tiempo la frontera. Juárez y El Paso no pueden estar separadas, por tradición histórica.
Graciela Espejo/ Comisionada del Centro Histórico de Ciudad Juárez
Ha sido muy provechoso para la economía de Ciudad Juárez, para el comercio, los hoteles, supermercados, farmacias, restaurantes, gasolineras, etcétera. Nos ha incomodado un poco en lo familiar, entre los que vivimos aquí y allá, pero nos hemos ajustado bien a la circunstancia, y prácticamente no se extraña el ir a El Paso. Las compras de los juarenses en El Paso como son ropa y electrodomésticos, han sido cubiertas por las compras en tiendas en línea «online «. Por lo que Juárez ha sido ganador en este cierre temporal de puentes. Y todo esto en el peor año económico de México en su historia, con una caída del PIB de menos 8 %.
Carlos Marroquín/ Unión Social de Empresarios de México