Presencia
En los primeros días de mayo, en diveras ciudades de México se presentaron apagones de luz. Y aunque se esperaba que la Comisión Federal de Electricidad (CFE) hubiera resuelto la situación surgió la mala noticia de que se presentarán más apagones.
Medios de comunicación publicaron que el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) declaró Estado Operativo de Alerta en el Sistema Interconectado Nacional (SIN) a raíz del incremento de la demanda de energía eléctrica, esto el pasado 10 de mayo.
De acuerdo a los reportes, el Cenace ha realizado recortes rotativos de energía para evitar que la Red Nacional de Transmisión colapse por completo y los daños en el sistema sean mayores.
Así lo informó también el presidente López Obrador, quien reconoció que hay un déficit de energía en el país y que se presentarían más apagones y reducciones de la energía eléctrica.
Por ello la pregunta de esta semana es:
¿Qué opina del déficit de energía que registra el país y qué se debería hacer para enfrentarlo?
En todo el país existe una crisis de insuficiencia eléctrica. Por ejemplo aquí en Ciudad Juárez, Chihuahua, se han presentado problemas en el suministro de energía. Es tan grave el problema de distribución y transformación que ha tirado por la borda la oportunidad de recibir inversiones en la localidad. Además, las fallas en el voltaje y los apagones afectan la productividad de empresas y comercios. Por ejemplo, en la zona centro de la ciudad, se han registrado apagones en época de calor que obligan a cerrar temprano a los negocios, pero los empleados siguen recibiendo salarios completos. Además, las variaciones en el voltaje afectan el funcionamiento de cuartos fríos y otros equipos que requieren energía eléctrica. Mega apagones han ocurrido debido a fallas en la subestación Moctezuma, interrumpiendo el suministro eléctrico en el área urbana. La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha sido deficiente para resolver estos problemas, urge que inviertan y den seguimiento a la construcción de infraestructura de transformación y de subestaciones de distribución eléctrica en la ciudad. La red de cableado es obsoleta y requiere de renovación. El gobierno federal ha parado las inversiones privadas de generación electrica con fuentes renovables de sol y viento. Y es claro que el país requiere de la coadyuvancia privada en esta materia en México, ya que la CFE ha sido incapaz de enfrentar las inversiones y el desarrollo necesario por si sola. Se requiere de un cambio de política por parte del gobierno federal para darle al país lo necesario.
José Mario Sánchez/Empresario
¿Cómo genera México su energía eléctrica? Más del 80 % se obtiene de los combustibles fósiles. Actualmente, la Comisión Federal de Electricidad (CFE) cuenta con 44 centrales de ciclo combinado, que en total generan más del 57% de la energía. Una central térmica de ciclo combinado funciona con gas natural y vapor. Pero, el problema es que la producción de gas natural cubre sólo 30.3 % de la demanda; mientras que, el resto se tiene que importar. La situación de México es única en el mundo; importa la mayor cantidad de gas natural de una sola fuente: Estados Unidos (Becerra, 2018). Esta situación puede generar disrupciones en el servicio. De hecho, ya están ocurriendo este tipo de emergencias. El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que México enfrenta un déficit de generación de energía. Ante este problema, él argumenta que es debido a la demora en la entrada de operaciones de algunas centrales de ciclo combinado; pero, el sector empresarial afirma que es por falta de inversiones en la diversificación de fuentes, incluyendo las renovables. En este sentido, expertos ambientalistas afirman que los efectos del cambio climático se están manifestando e influyendo de manera más rápida y extrema de lo que se pensaba originalmente.
Han habido grandes cambios en cuanto a las condiciones meteorológicas. Los inviernos se prolongan con temperaturas más frías e incrementa la necesidad de gas para la calefacción y la generación de electricidad. Por otro lado, en verano, las olas de calor aumentan la demanda de electricidad para el aire acondicionado. Las sequías disminuyen la energía hidroeléctrica, lo que empuja a las empresas energéticas a recurrir a los combustibles fósiles. En los últimos días, México ha batido varios récords de altas temperaturas que se prevé, seguirán subiendo. Se han registrado apagones en varios estados, que coincidieron con incrementos en la demanda de energía. Las fallas en la generación de energía eléctrica también han sido atribuidas a una menor producción de las presas hidroeléctricas por la sequía que golpea algunas regiones y las nubes que han limitado la actividad de las plantas de energía eólica. El Centro Nacional de Control de Energía dijo que la demanda máxima de megavatios obligó a declarar el Estado Operativo de Emergencia e iniciar la interrupción rotativa del suministro de energía eléctrica. Esto, para mantener la seguridad y confiabilidad del resto del sistema (Voz de América, mayo 9, 2024).
Los apagones han dejado al descubierto la fragilidad de políticas energéticas que revelan la falta de inversión y el desinterés por las energías renovables y por las colaboraciones público privadas. La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) afirmó que “el principal problema no es el incremento en la demanda de energía, sino la falta de nueva oferta de centrales eléctricas de generación” (Hernández, 2024). Con la ayuda de paneles solares, las industrias tienen la posibilidad de generar y consumir su propia energía. Esto permite que el impacto de los cambios tarifarios se reduzca considerablemente y que el costo de la energía generada por el sistema fotovoltaico se congele por más de 30 años de su vida útil. Además, contrario al incremento del gas natural, el costo de la tecnología solar se ha reducido 90% en los últimos 10 años; lo cual, permite un retorno de inversión de entre 4 y 6 años (enlight, 2021). Por todo lo expuesto, podemos concluir que México no está cumpliendo con sus compromisos a nivel internacional. Al firmar el Acuerdo de Paris, fijó como meta, generar el 35 % de su electricidad a partir de fuentes renovables.
María Fidelia Luna/ Máster en Educación Ambiental