Presencia
El alcalde de Ciudad Juárez anunció que han solicitado que el programa de “regularización de autos chuecos” implementado por el Gobierno Federal, sea permanente.
De acuerdo a lo publicado en medios locales de comunicación, el alcalde Cruz Pérez Cuéllar asegura que los autos “chuecos” cuya serie empiezan con letra, y que no entraron en el decreto de regularización, “siguen siendo un problema social”.
Por eso dijo que están en espera que se definan nuevas reglas para identificar a estos vehículos y que la regularización de autos “chuecos” sea permanente.
Por ello la pregunta de esta semana es:
¿Qué opina de esto y cuáles serían los beneficios o perjuicios para la ciudad con el programa de regularización de autos chuecos?
La regularización de vehículos puede significar de mucha ayuda para quienes no cuentan con los recursos económicos suficientes como para adquirir un vehículo de agencia, o bien, para quienes simplemente no desean asignar un alto presupuesto a vehículos de reciente modelo. No obstante, considero importante visualizar de manera más amplia los aspectos que pueden cobrar relevancia para la sociedad en su conjunto.
Por ejemplo, de acuerdo con datos proporcionados por los medios de comunicación, a nivel nacional se han legalizado alrededor de 1 millón 320 mil autos al 21 de marzo de 2021. Tan solo en el estado de Chihuahua, al mes de junio de 2023, se han legalizado alrededor de 260,000 vehículos con una recaudación de 650 millones de pesos, de los cuales son alrededor de 180 millones de pesos para el municipio de Juarez. Significa una suma importante de dinero para el erario; no obstante, no existe claridad en la distribución de tal recurso para el mejoramiento del estado o el municipio.
Surge la duda sobre lo que ocurrirá a todos aquellos vehículos que ya se encuentran en el país pero que no alcancen a ser registrados en el tiempo estipulado, o bien que, por su modelo, o lugar de fabricación no puedan ser legalizados. Quizá aquí podría ser el mayor riesgo que pueda representar para los Estados en materia de seguridad vial y seguridad pública. Pues gran cantidad de estos vehículos seguramente continuaran circulando en las calles sin matrícula y sin vinculación a la identidad del conductor.
Otro punto que pude resultar polémico, pero que vale la pena mencionar y evaluar, es el hecho de que se utilice el programa de regularización de autos chocolate como una estrategia clientelar para ganar terreno electoral en los comicios del 2024.
Mario López/ Más Humanista
Estamos a un año y tres meses desde que inició el decreto federal para la regularización de vehículos “chuecos”. Hace unos días, el secretario de Seguridad Pública Municipal declaraba que esta política no había representado ningún cambio respecto a los autos sin registro que se utilizan para cometer delitos, es decir, se siguen cometiendo la misma cantidad de ilícitos en este tipo de vehículos aun habiendo “regularizado” casi 80 mil vehículos hasta el momento. De acuerdo con su opinión, esto responde a que el cruce de este tipo de vehículos por la frontera sigue constantemente sucediendo.
Esta declaración, respondía en parte una de mis mayores dudas respecto a los objetivos de esta política ¿a quién beneficia realmente? En el decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación se habla de mejorar el bienestar de la población, de proteger el patrimonio familiar y de garantizar la seguridad pública. Desde mi perspectiva, de los tres objetivos mencionados, el último, el de la seguridad pública es el único que pudiera justificar este decreto, pero como se menciona arriba, no se ha visto resultado alguno.
Por otra parte, respecto a mejorar el bienestar de la población y proteger el patrimonio familiar, hay dos elementos que me parece esta política no considera, en primer lugar, que un auto no puede ser considerado como patrimonio, como sí lo es una casa. Un auto es un gasto, no una inversión, además de que es considerado de los objetos que más rápido se deprecian. Por otro lado, un auto es muy caro de mantener en regla y en condiciones óptimas mecánicamente: los costos de la revalidación cada año, licencia, engomado ecológico, mantenimientos periódicos, combustible, pueden representar un gasto muy elevado para muchas familias. Una política que verdaderamente beneficie a las familias sería el de un transporte público de calidad.
Por otro lado, en cuanto al bienestar de la población, queda claro que hay un gran desconocimiento sobre los efectos negativos de un aumento constante y exponencial del parque vehicular en una ciudad: congestión, mayores tiempos de traslados, siniestros viales, mala calidad del aire, ruido, estrés, etc. Actualmente, en Ciudad Juárez nos encontramos precisamente con este fenómeno, el incentivo que esta política de regularización representa, está funcionando como una oferta, y por tanto está aumentando la demanda. Las calles lucen saturadas incluso en horas que anteriormente no eran consideradas de mucho tráfico, y esto no va a disminuir. Por el contrario, si se continúa con este decreto indefinidamente, el problema vial seguirá en aumento, sin resolver de cualquier modo el tema de la seguridad.
Dra. Alma Rodríguez/ Docente Universitaria, urbanista
Aumentar el padrón vehicular en la ciudad regularizando la entrada de autos mayormente de
desecho de Estado Unidos, solo ha creado caos vial, contaminación y estrés en Ciudad Juárez.
Regularizar los llamados autos chocolates no ha sido una solución eficiente a los problemas y
necesidades de movilidad de las y los juarenses. La movilidad y seguridad vial requiere de
decisiones inteligentes, profesionales y de una coordinación entre los diferentes órganos y esferas de gobierno.
El rol de un gobierno en facilitar la movilidad y traslados de los habitantes de una ciudad de forma segura, accesible y sostenible es crucial. Algunos aspectos importantes del papel del gobierno en este sentido:
-Planificación y desarrollo de infraestructura eficiente e incluyente, priorizando carriles para bicicletas, aceras peatonales así como sistemas de transporte público eficientes y
energéticamente limpios.
-Promoción del transporte público: El gobierno puede promover el uso del transporte público
mediante inversiones en flotas modernas, horarios convenientes, frecuencias regulares y tarifas
accesibles. Asimismo, rutas de transporte público que brinden una cobertura amplia y eficiente.
-Incentivos para la movilidad sostenible: El gobierno puede implementar incentivos y políticas que fomenten la adopción de modos de transporte y movilidad sostenibles. Estos pueden incluir
programas de compartición de vehículos (Carpool), programas de bicicletas públicas, instalación
entre otros.
-Participación y consulta ciudadana: Es fundamental que el gobierno involucre a los ciudadanos en la toma de decisiones relacionadas con la movilidad urbana. Se pueden realizar consultas públicas, establecer mesas de trabajo y colaborar con organizaciones de la sociedad civil para comprender mejor las necesidades y prioridades de la comunidad.
En general, el gobierno debe asumir un papel activo y liderar iniciativas para lograr una movilidad urbana segura, accesible y sostenible. Esto requiere una visión estratégica, inversión en infraestructuras adecuadas, promoción de opciones de transporte sostenible y una estrecha
colaboración con la comunidad y otras partes interesadas para abordar los desafíos de movilidad de manera integral.
Abelamar Chacón/Peatones Heroicos
Es lamentable que nuestros gobiernos tomen decisiones con segundas intenciones. No es casualidad que de cara a las próximas elecciones locales y federales surja la declaración por parte de nuestro alcalde sobre un programa federal permanente de regularización de autos chuecos, dejando de lado los puntos que en realidad pueden impactar a favor o en contra del bien común.
Creo que el único beneficio palpable de un programa permanente sería el apoyo directo para las familias que buscan de manera honesta mejores condiciones de vida en esta frontera, sin embargo no podemos perder de vista los múltiples riesgos que se pueden presentar con la implementación de dicho programa, como lo son: El tema de la contaminación por las condiciones de los vehículos que se regularizan; el exceso de parque vehicular, que a su vez genera un alto índice de accidentes viales, además del aumento excesivo de tráfico en vialidades que no tienen las más mínimas condiciones de seguridad necesarias para los usuarios.
Por otro lado considero que siendo una ciudad cuyo principal motor económico es la industria maquiladora, en su mayoría de vehículos automotores, nos es conveniente apoyar al mercado de vehículos que se producen de manera parcial o total en nuestro país y ciudad.
Por último, considero que de llevarse a cabo dicha regularización permanente, ésta requeriría de ciertos filtros y restricciones que inhiban el aprovechamiento rapaz de organizaciones, agrupaciones y comerciantes que lucran con este tipo de vehículos, buscando con ello evitar que se desvirtúe el principal objetivo del programa, que debe ser en todo momento, el bien común.
Rafael O. Rodríguez Salcido/ RCEES El Señor de la Misericordia